La Sierra es uno de los barrios afectados por el paro armado. /FOTO: ARCHIVO.
El paro armado que hoy se vive en varios municipios del departamento de Antioquia también tocó una zona del oriente de Medellín.
Se trata de los barrio Villa Liliam, Villa Turbay y La Sierra, lugares de amplio dominio criminal del grupo delincuencial organizado la Sierra, estructura alineada al Clan del Golfo.
Pasó lo mismo
Luego de la extradición de Dairo Antonio Úsuga David, en esta zona de la capital antioqueña los delincuentes difundieron panfletos intimidatorios en la comunidad y obligaron a los comerciantes a cerrar sus negocios, tal y como sucedió en varias localidades de Antioquia. Igualmente, los bandidos le exigieron a una ruta de buses no seguir prestando el servicio.
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Ante esta problemática, uniformados de la Policía y el Ejército Nacional se desplazaron al sector buscando garantizar la seguridad para los residentes de esta zona y lograr que los comerciantes abran nuevamente las puertas de sus negocios, explicó el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, brigadier general Javier Josué Martín Gámez.
Otros sectores afectados
El alto oficial informó también que en la noche de este jueves, 5 de mayo, detectaron a 2 hombres realizando graffitis en el sector El Bolo. Momentos después detuvieron a 2 personas con las mismas características, las llevaron a la estación, los interrogaron y verificaron sus antecedentes.
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En cuanto al video difundido en las redes sociales, donde aparecen 2 hombres armados en una terraza de una vivienda del barrio Pachelly, en Bello, apoyando el paro, el alto oficial informó que lo están analizando, pero indicó que aparentemente sería reciente.
¿Suplantación?
El alto oficial también aseguró que hay estructuras delincuenciales, que no tiene nexos con el Clan del Golfo, que pescan en río revuelto por el paro armado para hacer de las suyas.
“Estamos observando también que se está presentando una especie de usurpación de marca criminal de algunos grupos delincuenciales de acá de Medellín con el fin de generar constreñimiento a las personas o darle realce a su actividad delincuencial”.
Comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, brigadier general Javier Josué Martín Gámez.