De izquierda a derecha: Bréiner Andrés Agudelo Pimienta, Maribel Pimienta Rivera y Jorge Alejandro Zapata García. /FOTOS: CORTESÍA.
Luego de haber sido dado de alta de un centro hospitalario, las autoridades capturaron a Jorge Alejandro Zapata García, un vigilante señalado de haber acabado con la vida de su expareja sentimental y el hijo de ella.
El caso que generó dolor e indignación entre los habitantes del Valle de Aburrá sucedió el pasado 27 de enero en el municipio de Itagüí.
Esa tarde, Jorge Alejandro sostuvo una conversación con su expareja, Maribel Pimienta Rivera, quien se encontraba acompañada de su hijo, Bréiner Andrés Agudelo Pimienta, de 17 años de edad.
/FOTO: CORTESÍA.Al parecer, la mujer de 35 años se negó a continuar la relación sentimental con este guarda de seguridad de 34 años. Maribel y Bréiner se fueron en una motocicleta, pero metros más adelante fueron atacados a bala, presuntamente por Jorge Alejandro.
/FOTO: CORTESÍA.Madre e hijo fueron llevados a un centro médico, donde fallecieron, mientras que Zapata García terminó con una herida de bala en la cabeza, presuntamente ocasionada por sí mismo.
Veintitres días después, luego de ser dado de alta por los galenos del centro médico en donde recibía atención, este vigilante fue detenido por funcionarios del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía y la Policía Nacional.
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El sospechoso fue presentado ante un juez de la república por los delitos de feminicidio agravado, homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego de defensa personal. Luego de la diligencia judicial, Jorge no aceptó su responsabilidad y fue enviado a prisión.