Ocho mil lavadoras, se espera que sean entregadas en barrios y comunas de la capital paisa.
18.000 integrantes de familias, se beneficiarán con agenda de ciudad, una iniciativa de la Secretaría de las mujeres de Medellín que busca disminuir las brechas sociales y generar mayor tiempo libre para las personas que se dedican a las labores domésticas
Con la entrega de cerca de 8.000 lavadoras a familias de escasos de la ciudad, se espera mejorar la calidad de vida de estas poblaciones de modo que sea posible tener más tiempo libre y generar una conciencia para que las labores del hogar sean compartidas.
En una empinada loma, a bordo de estrechas escaleras en el barrio Pablo Escobar, vive Cristina Fernández, sus días inician a las 5:00 a. m., entre esas labores que sagradamente debe hacer todos los días es el lavado de la ropa, en un lavadero que cuando no está en uso sirve para extender la la mesa de la cocina. El lavado a mano, asegura, le ha generado problemas de salud.
Para una parte de la población, tener este electrodoméstico es prioridad, para algunas familias, pese a ser necesario las condiciones económicas no se los permite. Cristina, asegura su esposo la apoya en los quehaceres diarios pero el lavado de la ropa, es una labor que sólo hace ella.
Asegura que de contar con este elemento, su tiempo lo podría aprovechar para fortalecer el emprendimiento de su hijo.
Beneficiar a familias como la de Cristina para que sea todos lo integrantes lo que puedan distribuirse las labores diarias es la meta de agenda segura, una iniciativa que está en estudio.
Se estima que en la ciudad hay 138 mil mujeres cabeza de hogar que cuentan con servicios públicos, es decir conexión a energía, acueducto y alcantarillado, pero no cuentan con una lavadora, y este trabajo deben hacer por sus propios medios, utilizando gran parte de su tiempo a está labor que por lo general es realizada por mujeres.
Ana María Valle, Secretaria de las Mujeres de la ciudad, aseguró que la intención es solo trabajar con las mujeres sino con los hogares para que se reduzca el tiempo que las mujeres se dedican al trabajo doméstico y de Cuidado no remunerado brindando solución tecnológica en este caso la lavadora pero todo bien acompañado del proceso pedagógico con los hogares.
No se trata solo de una lavadora, sino de una apuesta que pretende impactar de manera positiva a estas familias de modo que se eliminen las brechas sociales y se genere tiempo libre para que sea usado en otro tipo de actividades que permitan una mejor calidad de vida.
Una hora de trabajo doméstico y de cuidado no remunerado hace que las mujeres se aumenta en 2.3% la posibilidad de no Acceder al mercado laboral y que no pueda comunicar información electrónica
Datos de la Secretaría de las mujeres aseguran que 6 de cada 10 mujeres se dedica al trabajo doméstico durante 8 horas del día, la meta es impactar a 8 mil 700 mujeres y 18 personas no sólo con la entrega de lavadoras sino con intervención integral incluida en la Política de igualdad de género.
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