Para la Gobernación de Risaralda que fue la primera institución gubernamental en llegar al sitio, el bienestar de los damnificados, debe ser la prioridad; su atención alimentaria, salud y protección en lugares seguros.
“Al gobernador Víctor Manuel Tamayo Vargas, muchas gracias, él siempre ha estado pendiente de los hogares y nunca nos ha dejado solos”, dijo la auxiliar de enfermería, Luz Mary Castaño.
Funcionarios de La Secretaría de Mujer, Familia y Desarrollo Social y de la Primera Dama del departamento, brindaron ayuda y asistencia a más de 50 adultos mayores que se encontraban en el hogar del abuelo Divino Pastor.
La titular del despacho Elizabeth Diosa, explicó que por la seguridad y para salvaguardar la vida de los adultos mayores, se hizo el traslado de todos, del centro de bienestar del sector, para la misma sede vía a Armenia.
Allí se les entregó una ayuda alimentaria para todos, pues son unos 70 institucionalizados. Así mismo, se instaló una cocina comunitaria donde se estará brindado alimentación para cerca de 500 personas de las que habitan en el Avenida del Río y La Esneda, mientras sea necesario.
Victor Manuel Tamayo Vargas, gobernador de Risaralda ha dado instrucciones para recuperar cuanto antes el lugar y poder asistir a los damnificados, quienes se le acercaron en su visita al lugar de desastre para que les ayudara.
Elisabeth Diosa confirmó que la gente de Risaralda está mostrando toda su capacidad de solidaridad, pues están recibiendo muchas ayudas de la población civil, también de la empresa privada como la Fundación Frisby, quienes se sumaron con la donación de más de 500 sopas ya listas para los damnificados y para las personas que están brindando apoyo en el sector.
También diferentes empresarios que se han sumado con alimentos listos para la entrega. Vale la pena resaltar que en el parqueadero de la Gobernación se recibían cientos de productos no perecederos para las personas afectadas por el deslizamiento de tierra.