El pasado lunes 1 de noviembre un grupo de barristas del Deportes Quindío ingresó al terreno de juego buscando atacar a los árbitros del encuentro que dejó como resultado el empate entre el Milagroso y Santa Fe.
En los hechos se evidenciaron disturbios entre hinchas, policías y las personas que se encontraban allí. De hecho, algunos jugadores fueron atacados por hinchas que intentaban quitar sus camisetas. De hecho, otro grupo de hinchas también ingresó a la cancha con el objetivo de defender a los jugadores y protegerlos de los ataques.
Frente a la descontrolada situación, las autoridades del municipio confirmaron que en total 8 personas resultaron lesionadas y otras más fueron retenidas. Es por esta razón que este martes se instalará un Puesto de Mando Unificado con el objetivo de analizar la situación ocurrida y las medidas a tomar al rededor de ello.