Almacenes La 14 tendrá que explicar la situación en la que está en este momento, y qué pasará con sus colaboradores y empleados. Solicitó su liquidación, pero por ahora sigue operando “con normalidad”.
Noticias Valle.
Tal vez como ha sucedido con otros almacenes y empresas al entrar en el proceso de insolvencia y no poder recuperarse, La 14 por su infraestructura y su presencia de mercado podría terminar comprada por algún grupo empresarial, pero por ahora, la incertidumbre de su situación crece al conocerse que solicitó su liquidación judicial.
Este proceso se solicita amparado en los Artículos 47 y 49 Ley 1116 de 2006.
Una vez presentado, pasa a evaluación, pero ante su situación lo que muchos temen es que “seguramente será aprobada”. Es decir, se acabará La 14.
Cuando se pide esta liquidación, es porque “supone la existencia de una situación de cesación de pagos de una sociedad; inicia por el incumplimiento o fracaso de un acuerdo de reorganización”.
No hay un pronunciamiento oficial por parte de la empresa vallecaucana, pero al medio TuBarco si pudo confirmar que hizo esa solicitud, cuyo documento terminó filtrado en redes sociales y medios.
“Debido a la inviabilidad de la operación comercial de la compañía” Almacenes La 14 S.A. y Calima Desarrollos Inmobiliarios S.A., solicitó “para evitar mayores perjuicios a los acreedores”, se lee en un documento.
Desempleo
No hay claridad sobre cuántos trabajadores tiene como fijos o de planta Almacenes La 14, pero son cientos; desde aseadores hasta cajeros, bodegueros, personal administrativo, de ventas y otras áreas.
Cuando en diciembre del año pasado se confirmó que estaba en proceso de reestructuración ante la Superintendencia de Sociedades, informaban que contaban con 3295 colaboradores.
Ahora, el desempleo preocupa.
En este momento, la empresa no ha cerrado, ni parado sus operaciones. Los almacenes siguen atendiendo y por ahora, opera “con normalidad”.
Será la SuperSociedades que determine el paso a seguir.
La crisis de años
Hace más de ocho meses La 14 está en un proceso de reestructuración.
En diciembre del 2020 su almacén en Bogotá había cerrado y en Cali y otras tiendas del Valle del Cauca, ya había crisis, las quejas “porque han desmejorado”, eran muchas.
Tiendas vacías, poco personal, y sin respuestas claras del deterioro que se agudizó en la empresa heredada.
La competencia, el cuestionado manejo de la empresa que fundó el padre y heredó a los hijos, sumado a las crisis económicas generadas por la pandemia del Covid-19 y el paro nacional que si hizo mella en temas de ventas, con las que se trataba de cumplir a los acreedores.
Golpe al empresariado vallecaucano
No es la única empresa, ya sea de socios, familiar, el único emprendimiento o proyecto económico en crisis en el Valle del Cauca en este momento, pero si es una cadena de almacenes iconico, de ejemplo y querido en el departamento.
Esto se conoce en un momento en que La 14 ‘mejoraba’ porque varias sedes ya tenían más surtido, y en abril del 2021 se había informado que “gradualmente empezará a surtir sus almacenes”.
Había esperanza, ahora hay incertidumbre, tristeza y también reflexión en torno al apoyo a las marcas propias, a lo local.
En enero de este año, así estaba el panorama:
Una empresa de orgullo
Esta empresa icono para los vallecaucanos que creó lazos y sentido de pertenencia, nació durante el 1964.
Su fundador, Abel Cardona, un emprendedor de siempre, inició con una ferretería en el centro de Cali. En septiembre de este año, falleció otro de sus cofundadores, Alberto Cardona.
Negocio que con el pasar de los años se fortaleció y fue creciendo hasta convertirse en uno de los emporios comerciales más importantes, grandes y exitosos del suroccidente colombiano.
LA CADENA SIEMPRE HA PROMOVIDO ‘COMPRE COLOMBIANO’.
Caracterizándose siempre por suplir las necesidades y demandas de aquellos artículos utilizados en las labores del hogar, mercado, víveres, artículos escolares y electrodomésticos, entre otros.
De esa manera y luego de ir consolidando poco a poco a Almacenes La 14, se generó una expiación escalonada que llegó a trascender limites regionales.
Donde además de hacer presencia en zonas como Buenaventura, Tuluá, Palmira y Jamundí, se extendieron a otras ciudades y fueron pioneros en marcas propias.