Los cuerpos sin vida del anciano de estaban con señales de violencia dentro de una vivienda del sur oriente de Bogotá.
No fue uno, fueron dos los cadáveres hallados en las últimas horas por agentes de la Policía Metropolitana de Bogotá (Mebog) y unidades de criminalística del Cuerpo Técnico de Investigación CTI, dentro de una vivienda ubicada en el sur oriente de la capital del país.
El doble crimen contra un adulto mayor y una señora se presentó en una residencia del barrio Altamira en la localidad San Cristóbal Sur de Bogotá.
Como en su momento lo informó el noticiero Alerta Bogotá, un abuelo de 72 años de edad, identificado como Heraclio Lanceros resultó ubicado tendido sin signos vitales sobre la cama de su alcoba con un fatal golpe en la cabeza, producto de un presunto garrotazo.
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Pero mientras se adelantaba el levantamiento del cuerpo de don Heraclio, quienes practicaban las labores forenses en el sitio, se percataron que unos cartones escondían algo debajo de una cama en otra pieza del predio.
Al verificar que era, los expertos de la Fiscalía General de la Nación, se llevaron la sorpresa de ubicar el cadáver de otra persona, una mujer de unos 55 años de edad, identificada como Aída Orovio, la cual también presentaba señales de violencia en diferentes partes del cuerpo.
Los restos mortales del señor Lancheros y doña Aída, fueron conducidos en el laboratorio móvil a las instalaciones del instituto de Medicina Legal, mientras sabuesos especiales tratar de descifrar ese ‘rompecabezas’ que terminó con la vida de la pareja.