En lo que va del año el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, Dagma, ya ha logrado la liberación aproximadamente 900 animales.
El panorama en Cali respecto al tráfico animal es desalentador, una lucha que parece no encontrar una salida en la capital del Valle. En lo que va del año el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, Dagma, ya ha logrado la liberación aproximadamente 900 animales silvestres.
Sin embargo, el panorama a nivel nacional no es diferente, la Policía Nacional solo entre el 01 de enero del 2023 y el 24 de marzo del presente año incautó la alarmante cifra de cerca de 40.000 animales silvestres que iban a ser víctimas del crudo tráfico ilegal.
“Nosotros recibimos entre 200 y 250 mensuales, los cuales llegan malnutridos, deshidratados. Algunos de ellos llegan mutilados. Incluso algunos primates llegan con los colmillos partidos”.
Delio Orejuela, Coordinador Operativo del Hogar de Paso de Fauna Silvestre, Dagma.
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La difícil realidad que se vive se ve reflejada en la expresión de un ocelote que se encuentra en el hogar de paso de Fauna Silvestre del Dagma, que con tan solo 3 años, fue retirado de su hábitat natural y que tendrá que pasar el resto de su vida solitario en cautiverio.
“Estos animales no pueden ser liberados ya, porque al no poder cazar por sus propios medios lo que van a querer comer son animales silvestres y serían un peligro para la población”.
Delio Orejuela, Coordinador Operativo del Hogar de Paso de Fauna Silvestre, Dagma. .
Todas estas cifras y este panorama que refleja Cali, han posicionado a la ciudad como una de las capitales del tráfico animal.
“Todo lo que viene del Chocó y Buenaventura pasa por Cali. Básicamente, cuando nosotros hacemos operativos encontramos animalitos empacados de alguna forma para ser vendidos como mascotas o ser consumidos”.
Andrés Posada, subdirector Calidad Ambiental Dagma.
Pero, ¿Qué tan lucrativa resulta siendo esta práctica ilegal?
“Es uno de los negocios más lucrativos a nivel mundial, estando en el segundo lugar de la escala. El conocimiento que tenemos es que el precio de las guacamayas alcanza los tres millones de pesos. En el caso de los tigrillos los precios pueden llegar a los seis millones de pesos”.
Nicolás Melo, Líder del Grupo de Fauna Silvestre del Dagma.
Y es que, en la actualidad, la humanización de mascotas como perros, gatos y hasta de caballos se ha vuelto una práctica del común. Sin embargo, el mercado negro de fauna silvestre ha provocado que animales que son considerados como ilegales para tener como mascotas estén cada vez más en los hogares.
Pero, ¿Qué tan fácil es acceder a ellos en Cali? El Noticiero 90 Minutos llegó hasta el centro de Cali y esto fue lo que encontró:
Contactamos al traficador, preguntándole por una tortuga Morrocoy, una de las especies más incautadas por las autoridades.
Sin embargo, todas las especies no son retornadas a sus habitas naturales. Este caleño quien solicitó no relevar su identidad tuvo en su poder por años una de esas especies ilegales como mascota.
“Siempre pensé que como lo cuidábamos y alimentábamos estaba en buenas manos, pero después nos enteramos de que le estábamos haciendo un daño. Incluso no sabíamos que era fauna prohibida para tener en la casa y lastimosamente el loro falleció”.
Caleño que tenía un animal silvestre como mascota.
Cabe señalar que, la tenencia de una especie de fauna como mascota está regulada por la ley 1333 de 2009, por lo que las personas que sean sorprendidas cazando, transportando, comercializando pueden ser pagar entre 4 y 9 años de prisión.