El sepelio del menor de cinco año se cumplió en el cementerio de El Apogeo, en el sur de Bogotá.
Con un sonoro aplauso y en medio de lágrimas fue despedido este viernes el pequeño Gabriel Esteban, quien fue asesinado por su papá, en hechos ocurridos en un hotel de Melgar, en el Tolima.
Al oficio religioso asistieron los familiares, quienes expresaron su tristeza, al tiempo que exigieron justicia para quien acabo con la vida del pequeño Gabriel.
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También las autoridades de infancia y adolescencia de la Policía Metropolitana de Bogotá acompañaron el féretro del menor de edad, cuya muerte causó repudio en el país.
Por su parte, los compañeros de trabajo de la mamá de Gabriel Esteban también asistieron a este sepelio realizado en el cementerio El Apogeo, en el suroccidente de la ciudad de Bogotá.
Entre tanto, los vecinos del barrio Sierra Morena, en la localidad de Usme, hicieron presencia con carteles, con pancartas, bombas blancas y cintas de color azul, para expresarle su cariño y solidaridad, por tan difícil momento.
Fue así que el rechazo a este hecho se convirtió en la constante, por parte de quienes acompañaron este oficio religioso del menor Gabriel Esteban.
La lluvia también acompañó la jornada, aunque no fue obstáculo para que los asistieron hicieran presencia en la parte donde fue sepultado el menor asesinado.
El párroco de la iglesia El Señor del Monte de Galilea hizo un llamado por los más débiles, los niños y los adultos mayores, al tiempo que preguntó, por qué son los que están siendo más vulnerados en sus derechos.
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Uno de las pancartas con la que se acompañó el cuerpo del pequeño decía: «que brille para ti, la luz que no tiene fin», con la cual se expresó el cariño al menor asesinado.