Las autoridades presumen que la droga pertenecía al “Clan del Golfo”.
Un canino fue pieza clave para las autoridades para realizar la incautación de 51,3 kilogramos de cocaína en el interior de un contenedor en el puerto de Santa Marta.
El descubrimiento se dio tras una minuciosa investigación desarrollada por parte de un binomio canino de la estación de guardacostas de Santa Marta y uniformados de la Policía Antinarcóticos.
En la inspección, los agentes de la Armada de Colombia encontraron escondidos en el sistema de refrigeración 50 paquetes rectangulares, los cuales al ser sometidos a las pruebas de identificación preliminar homologadas – PPHH-, dieron como resultado positivo para cocaína.
De acuerdo con las primeras investigaciones adelantadas por las autoridades, el alcaloide tenía como destino final Rotterdam, Holanda.
Asimismo, se pudo conocer que al parecer el cargamento pertenecería al Grupo Armado Organizado “Clan del Golfo”.